Una de las historias de mi abuelita Esperanza, eran las luchas permanentes que veía en Iquitos, por parte de los indígenas luchando porque se respeten sus costumbres, sus tierras, sus vidas.
Esperanza murió hace unos años, apoyándome en mis luchas por la democracia, o mejor dicho, alcahueteándome a escondidas y donando su celular para la causa.
Mi abuela creyó que las cosas habrían cambiado, las noticias de la amazonía eran de aparente progreso.
Otra Abuela, machiguenga, decía en 1992 en su testimonio al ILV :“Hace mucho tiempo yo no vivía aquí; vivía en las cabeceras. Hoy es diferente. En esa época conspiraban para vendernos; hoy eso ha terminado. Ya no tengo miedo; no tenemos que huir al monte cuando llega una persona blanca.”
“(…)Era un hombre malo que secuestraba a la gente. Iba a cazarlos y los traía al patrón a punta de escopeta. Al capturarlos, los golpeaba (…) Hasta mataba a algunos. Si las mujeres andaban despacio porque estaban cargando niños en los brazos, les quitaba los hijos y los tiraba al río.” Relato del Mantaro Chico, 1968. (Los Machiguengas aprenden a leer. Patricia Davis PUCP-ILV 2002. PP 11)
Cómo decirles que no es así, que las cosas no han cambiado, que ahora es peor, que nuestro propio gobierno quiere rematar nuestras tierras, seguramente por un negociado ilícito de los que acostumbra.
Cómo decirle a Esperanza que han mandado a matarnos a la PNP, policías como su esposo Roberto, contamanino, ucayalino.
No se los puedo decir abuelas, abuelo.
Y para no decírselos, vamos a luchar todos.
Esperanza murió hace unos años, apoyándome en mis luchas por la democracia, o mejor dicho, alcahueteándome a escondidas y donando su celular para la causa.
Mi abuela creyó que las cosas habrían cambiado, las noticias de la amazonía eran de aparente progreso.
Otra Abuela, machiguenga, decía en 1992 en su testimonio al ILV :“Hace mucho tiempo yo no vivía aquí; vivía en las cabeceras. Hoy es diferente. En esa época conspiraban para vendernos; hoy eso ha terminado. Ya no tengo miedo; no tenemos que huir al monte cuando llega una persona blanca.”
“(…)Era un hombre malo que secuestraba a la gente. Iba a cazarlos y los traía al patrón a punta de escopeta. Al capturarlos, los golpeaba (…) Hasta mataba a algunos. Si las mujeres andaban despacio porque estaban cargando niños en los brazos, les quitaba los hijos y los tiraba al río.” Relato del Mantaro Chico, 1968. (Los Machiguengas aprenden a leer. Patricia Davis PUCP-ILV 2002. PP 11)
Cómo decirles que no es así, que las cosas no han cambiado, que ahora es peor, que nuestro propio gobierno quiere rematar nuestras tierras, seguramente por un negociado ilícito de los que acostumbra.
Cómo decirle a Esperanza que han mandado a matarnos a la PNP, policías como su esposo Roberto, contamanino, ucayalino.
No se los puedo decir abuelas, abuelo.
Y para no decírselos, vamos a luchar todos.
HOY MOVILIZACIÓN 5PM EN LA PLAZA FRANCIA HACIA EL CONGRESO
11 DE JUNIO: PARO NACIONAL
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